Los Reyes del Tarot de Marsella es el último artículo de esta miniserie que hemos dedicado a las Figuras de Corte o Cartas de Corte del Tarot de Marsella. Anteriormente ya hemos analizado las Reinas, los Caballos y las Sotas.

Los Reyes del Tarot de Marsella también han visto una evolución en la grafía de sus nombres. Empezaron siendo ROY, y la evolución del idioma francés los acabó dejando en ROI, algo parecido a la evolución del nombre de las Reinas que analizamos en este otro artículo.

Al igual que las Reinas, los reyes también llevan corona (también el de Oros aunque no esté tan claro). Están sentados en tronos, aunque su postura no parece muy cómoda y tienen los pies a la vista. En cambio, todos ellos están enfocados hacia la derecha, hacia el futuro, algo que en la reinas sólo ocurre con la de Bastos.

En términos generales se puede decir que las Cartas de Corte de los palos “duros” (bastos y espadas) parecen guerreras y están inclinadas hacia la acción. Por contra, las figuras de los palos suaves (Copas y Oros) parecen más pacíficas y relajadas. Los reyes de los palos duros del Tarot de Marsella parecen más jóvenes, llevan armadura y sostienen su arma con la confianza que da la experiencia. Parece que estén a punto de levantarse de su trono y encaminarse hacia la derecha.

En cambio, los Reyes de los palos suaves del Tarot de Marsella parecen más mayores, incluso viejos. También parecen más asentados en sus tronos, con menos ganas de levantarse que los dos anteriores. Ambos miran también hacia la derecha, pero con cierta prevención o incluso desconfianza.

 

Los Reyes del Tarot de Marsella

Un primer vistazo

Los Reyes del Tarot de Marsella

Cada Rey tiene un sombrero de ala ancha y abierto hacia arriba. Esto último puede ser interpretado como una posibilidad de aceptar influencias e ideas nuevas, y todo lo que esto implica: cambio y evolución.

Como decíamos antes los Reyes de los palos suaves del Tarot de Marsella parecen más ancianos que los otros dos, y tienen sus barbas acabadas en dos puntas (¿capacidad de ver las cosas desde dos puntos de vista al mismo tiempo?) y llevan un traje. Todo en ellos simboliza madurez, sabiduría prudente, paciencia.

Los Reyes de los palos duros parecen más jóvenes y aguerridos. Llevan armadura y no traje. Y sus rostros están afeitados, no tienen barba. Todo en ellos simboliza acción, dinamismo, energía.

Los cuatro Reyes del Tarot de Marsella portan en su mano derecha el símbolo de su palo, y en tres de ellos también se apoya en sus rodillas. Sus tronos no son visualmente simétricos y su postura parece ciertamente inestable.

Los pies de los cuatro reyes apuntan hacia la izquierda (el pasado, viejos hábitos), pero sus rostros miran todos hacia la derecha (el futuro). Esto genera un movimiento de torsión, de giro, lo que implica poder estar a dos cosas al mismo tiempo, pero también indecisión. Hay implícita la voluntad de avanzar hacia una nueva dirección.

Los Reyes del Tarot de Marsella pueden expresar una posición de poder, control, fase de madurez, experiencia,…

Los Reyes mayores del Tarot de Marsella

El Rey de Oros

Rey de Oros del Tarot de Pablo Robledo

La principal diferencia del Rey de Oros con respecto al resto de los reyes radica en la corona, que aquí no es tan explícita y está marcada en el sombrero que lleva. Además no está dentro de un palacio, sino que, también de forma excepcional, su trono se encuentra colocado en un espacio al aire libre. Se puede interpretar de aquí la capacidad de tener “los pies en la tierra”, evitar las alharacas y los lujos innecesarios.

Este Rey también es diferente con respecto al resto de las Figuras de Corte del palo de Oros. ¡Es la única que no mira con intensidad a su moneda! Por el contrario la tiene apoyada en su regazo, como si no necesitara prestarla atención, como si estuviera asegurada. Esto le permite dirigir su atención a otra parte, hacia el futuro. Tal vez esté pensando en qué hacer a futuro con esa moneda, cómo invertirla, cómo sacar beneficios de ella.

Su línea de visión está abierta y delimitada por el sombrero y su propio hombro. El cuerpo se inclina ligeramente hacia la izquierda (precaución, reticencia, examinar bien algo antes de apresurarse hacia ello,…).

Las piernas, que están cruzadas, y la mano en el cinturón recuerdan poderosamente al Arcano Mayor del Emperador, por lo que podemos aplicar algunas de sus atribuciones aquí, como el autocontrol y la disciplina.

 

El Rey de Copas

Rey de Copas del Tarot de Pablo Robledo

La copa que este rey sostiene en su mano se asemeja bastante a la de la reina de copas, aunque la de ésta tiene tapa y está cerrada. En cambio la de este rey tiene una abertura estrecha de lo que podríamos interpretar una estrechez de miras emocional o una expresión muy controlada de las emociones.

En algunos mazos la copa parece partida en dos partes que está unidas por la mano del rey. Es decir, no están alineadas la parte superior e inferior de la copa. De aquí podemos extraer la noción de una cierta psicosis emocional, una parte no se conecta con la otra aunque lo aparente. También podemos ver aquí un símil de un corazón roto que el rey se empeña en ocultar al juntar las dos partes rotas con su mano.

Y hace todo esto mirando hacia adelante, hacia el futuro, como hemos indicado antes que hacen todos los reyes. Esto implica un salto hacia adelante, una huida hacia el futuro sin dejar solucionados los problemas o traumas del pasado. Pasado hacia el que se muestra la copa en su mano, no lo olvidemos.

Este rey de copas, como todos los reyes del Tarot de Marsella, tiene las alas del sombrero levantadas. Esto implica tener una buena visión de lo que hay alrededor, y expresa apertura a recibir mensajes nuevos, y también relaciones nuevas. Sus pies apuntan los dos hacia el pasado, algo que sólo vemos también en el rey de Espadas.

 

Los Reyes jóvenes del Tarot de Marsella

El Rey de Bastos

Rey de Bastos del Tarot de Pablo Robledo

En esta figura de corte del palo de bastos vemos un basto que no tiene nada de natural. Está trabajado, se le ha dado forma manualmente, de hecho la punta inferior parece hasta metálica. El dar forma al basto puede implicar el lograr los deseos propuestos, un éxito, o también el tenerlos bajo control, el fracaso de la represión de los instintos.

El pie derecho, como en todos los reyes del Tarot de Marsella, apunta hacia la derecha, hacia el pasado. Pero en este rey, el talón del pie izquierdo está levantado, como si estuviera apoyando únicamente la puntera dispuesto a levantarse en cualquier momento hacia el futuro. Hay expresado un impulso hacia adelante que puede suceder en cualquier momento. Esto lo vemos también expresado en los ángulos que marcan el codo y la rodilla izquierda de este rey.

Sin embargo, la punta de su largo bastón está apoyada en el talón de su pie izquierdo. Si se descuida podría herirse a sí mismo. Esto puede tener una doble lectura. De un lado, el querer espolearse a sí mismo a ponerse en marcha, como se hace con un caballo. Por otro lado, puede así refrenar un entusiasmo desmedido que pudiera ser imprevisto.  Pero también hay que tener en cuenta que si pincha demasiado fuerte, podría quedar inmovilizado. Éste sería un claro ejemplo de auto sabotaje.

En lo que respecta a la mirada de este joven rey, podemos aplicarle el calificativo de cauta, desconfiada o incluso irónica. Esa ceja derecha levantada puede dar lugar a diversas interpretaciones. La mirada tiene campo abierto por delante de sí, tanto por el sombrero con el ala levantada, como por el espacio que delimita el trono a su espalda.

 

El Rey de Espadas

Rey de Espadas del Tarot de Pablo Robledo

En los hombros de este rey podemos ver las mismas máscaras que encontramos en los hombros del auriga del Arcano Mayor del Carro. De hecho tienen también una cierta semejanza de rasgos físicos en su rostro. Podríamos decir que aquí hay un nexo de unión, un puente o vínculo entre ambos arcanos.

Estas máscaras puede indicarnos una doble posibilidad de acción, dos vías diferentes, y la división vertical de la coraza del rey indicaría la división interna entre ambas. Es decir, no saber qué opción tomar, está dividido entre lo viejo y lo nuevo. Ambos pies apuntan hacia la izquierda, como ya vimos antes en el rey de copas. Pero en este mismo lado izquierdo es donde está la espada que el rey sostiene, como si él mismo estuviera bloqueando la opción representada por esa máscara. Esto se vería reforzado por el hecho de que este rey mire en dirección opuesta a sus pies, hacia la derecha, hacia el futuro, hacia la otra máscara.

La típica asociación entre espadas y actividad mental se vería reforzada en este rey por el hecho de tener la punta de la espada a la altura de su cabeza. Pero el rey no mira su espada, puesto que no necesita hacerlo para analizar y refrenar sus pasiones. Es su pura esencia, su comportamiento innato. No necesita recordarlo para actuar como hace siempre, aplicando sus capacidades intelectuales.

Su mirada, directa, es muy parecida a la del rey de bastos, con una cierta sospecha y análisis en su apariencia. Goza de un campo amplio de visión gracias al ala levantada de su sombrero. La capacidad mental o analítica se ve remarcada aún más por la luz amarilla que hay en su corona.

 

Nota:

Para este artículo hemos utilizado los reyes del Tarot de Marsella de Pablo Robledo.